Roberto Molina
El anuncio de la publicación de video escándalos, hecha por el diputado federal Héctor Pablo Ramírez Puga Leyva desde luego que no se dio por iniciativa propia ya que muy pocos en este sexenio actúan de tal manera. El anuncio fue consensado analizado y discutido desde puente de piedra en la zona exclusiva de San Felipe del Agua.
En petit comité se tomó la decisión de terminar con uno de los hombres más beneficiados de este sexenio y decimos uno, porque en la palestra existen muchos más, lo mismo dirigentes de alto nivel de todos los partidos, conocidos dirigentes políticos, asociaciones civiles y hasta los tradicionales defensores de oficio del sistema.
Con esta decisión se buscaba mandar un mensaje claro, al estilo de las mejores mafias, de qué es lo que pasa cuando no se cumplen los pactos establecidos. De ahí que más de uno de los dirigentes se alejara de los reflectores por lo menos temporalmente en lo que se da por terminado este capítulo bochornoso de la política mexicana.
Guillermo Zavaleta perdió piso y muy pronto, envalentonado por encontrarse en grandes ligas, se quiso desprender de su cordón umbilical, sólo que a sus creadores no les gustó la idea. Si bien había venido cumpliendo algunos de los compromisos puntualmente de repente cambio su discurso y se volteó en contra de sus progenitores.
La dirigencia panista estatal guardó silencio, sus amigos de partido han criticado los exabruptos por parte de dos diputadas federales en contra de él y particularmente en el caso de la diputada Margarita Liborio, la han llamado cavernícola, arcaica, Paquita la del Barrio dos y hasta corriente, por decir lo menos, pero nadie en su sano juicio ha metido las manos al fuego por el diputado.
Las razones son claras, más de uno sabe porque le consta y otros de oídas, de las negociaciones realizados por Guillermo, pero para los que no las conocen hagamos un recuento de ellas.
Cuando perdió la presidencia municipal de Juquila, el Estado lo tocó como acostumbra y una propuesta económica fue suficiente para terminar con el conflicto poselectoral que amenazaba con desbordarse.
En el congreso local, las negociaciones se hacían con Zavaleta haciendo a un lado a Carlos Moreno Alcántara en su entonces papel de coordinador de la bancada panista. Si no lo creen, pregúntenle.
Todas sus campañas, exceptuando la de la presidencia municipal de Juquila, fueron realizadas con cargo al erario estatal, lo mismo la de diputado local que la de federal y la de candidato a la presidencia municipal de la ciudad de Oaxaca desviando para ello recursos del congreso local primero y después del COPLADE a través de su padrino político *Bulmaro Rito.
Cuentan que la misma regidora que lo sustituye en el cabildo municipal de Oaxaca de Juárez, Leslie Jiménez, fue la que puso al descubierto la negociación con Hernández Fraguas para tener una dieta superior a los demás regidores, lo cual es cierto pues al menos así aparece en algunos documentos oficiales de la presidencia municipal. Claro que siendo objetivos, tampoco es mucho, son solo 40 mil pesos quincenales los que devengaba como regidor y que la suplente reclama para ella.
Recursos a manos llenas, flotillas de vehículos, infraestructura y todas las facilidades como si se tratara de un funcionario del gobierno le dieron para cumplir sus cometidos, siempre que los pidió.
Los recursos solicitados para apoyar la campaña de Santiago Creel quedarán al des cubierto en los próximos días cuando se exhiban los videos, donde más de un miembro de la burbuja aparecen y donde el bejaranazo será cosa de niños.
Así, los enemigos de Andrés Manuel, esos que se desgarraban las vestiduras y lo querían ver en el cadalso por lo de Bejarano, seguramente guardarán silencio ya que de no hacerlo correrán la misma suerte de verse exhibidos.
Por lo pronto el mensaje ha cumplido su cometido, pues más de uno se ha quedado quieto para no correr la misma suerte.
Si no al tiempo.
*Hidrochoerus – hidrochaeris.
En petit comité se tomó la decisión de terminar con uno de los hombres más beneficiados de este sexenio y decimos uno, porque en la palestra existen muchos más, lo mismo dirigentes de alto nivel de todos los partidos, conocidos dirigentes políticos, asociaciones civiles y hasta los tradicionales defensores de oficio del sistema.
Con esta decisión se buscaba mandar un mensaje claro, al estilo de las mejores mafias, de qué es lo que pasa cuando no se cumplen los pactos establecidos. De ahí que más de uno de los dirigentes se alejara de los reflectores por lo menos temporalmente en lo que se da por terminado este capítulo bochornoso de la política mexicana.
Guillermo Zavaleta perdió piso y muy pronto, envalentonado por encontrarse en grandes ligas, se quiso desprender de su cordón umbilical, sólo que a sus creadores no les gustó la idea. Si bien había venido cumpliendo algunos de los compromisos puntualmente de repente cambio su discurso y se volteó en contra de sus progenitores.
La dirigencia panista estatal guardó silencio, sus amigos de partido han criticado los exabruptos por parte de dos diputadas federales en contra de él y particularmente en el caso de la diputada Margarita Liborio, la han llamado cavernícola, arcaica, Paquita la del Barrio dos y hasta corriente, por decir lo menos, pero nadie en su sano juicio ha metido las manos al fuego por el diputado.
Las razones son claras, más de uno sabe porque le consta y otros de oídas, de las negociaciones realizados por Guillermo, pero para los que no las conocen hagamos un recuento de ellas.
Cuando perdió la presidencia municipal de Juquila, el Estado lo tocó como acostumbra y una propuesta económica fue suficiente para terminar con el conflicto poselectoral que amenazaba con desbordarse.
En el congreso local, las negociaciones se hacían con Zavaleta haciendo a un lado a Carlos Moreno Alcántara en su entonces papel de coordinador de la bancada panista. Si no lo creen, pregúntenle.
Todas sus campañas, exceptuando la de la presidencia municipal de Juquila, fueron realizadas con cargo al erario estatal, lo mismo la de diputado local que la de federal y la de candidato a la presidencia municipal de la ciudad de Oaxaca desviando para ello recursos del congreso local primero y después del COPLADE a través de su padrino político *Bulmaro Rito.
Cuentan que la misma regidora que lo sustituye en el cabildo municipal de Oaxaca de Juárez, Leslie Jiménez, fue la que puso al descubierto la negociación con Hernández Fraguas para tener una dieta superior a los demás regidores, lo cual es cierto pues al menos así aparece en algunos documentos oficiales de la presidencia municipal. Claro que siendo objetivos, tampoco es mucho, son solo 40 mil pesos quincenales los que devengaba como regidor y que la suplente reclama para ella.
Recursos a manos llenas, flotillas de vehículos, infraestructura y todas las facilidades como si se tratara de un funcionario del gobierno le dieron para cumplir sus cometidos, siempre que los pidió.
Los recursos solicitados para apoyar la campaña de Santiago Creel quedarán al des cubierto en los próximos días cuando se exhiban los videos, donde más de un miembro de la burbuja aparecen y donde el bejaranazo será cosa de niños.
Así, los enemigos de Andrés Manuel, esos que se desgarraban las vestiduras y lo querían ver en el cadalso por lo de Bejarano, seguramente guardarán silencio ya que de no hacerlo correrán la misma suerte de verse exhibidos.
Por lo pronto el mensaje ha cumplido su cometido, pues más de uno se ha quedado quieto para no correr la misma suerte.
Si no al tiempo.
*Hidrochoerus – hidrochaeris.